Hola a todos,
Mi llegada a Nepal coincidió con las celebraciones de Tihar (Dipawali en India), el festival de las luces y el color, lo más parecido a nuestra navidad.
Las niñas de la casa de acogida prepararon las velas para adornar la casa de noche y construyeron con polvos de colores y barro el camino desde la entrada hasta la habitación donde se harían la ofrendas a la diosa Laxmi en la primera noche. Después de la cena, las niñas fueron de casa en casa cantando canciones típicas de este festival y recolectando las ofrendas que les daban los vecinos.
Al día siguiente comenzamos con las ofrendas a la vaca, y luego las niñas pasaron todo el día preparando colares de flores para decorar y cocinando algunos dulces típicos de estas fechas. Por la noche volvieron a ir de ruta en la aldea cantando y bailando para deleitar a los vecinos de la aldea.
El tercer día es el día del hermano, y las niñas decidieron convertirme en su hermano y bendecirme una por una con collares de flores, y polvos de colores que ponen en la frente. Todo esto mezclado con distintos ritos donde se adora a los dioses con incienso, velas, fruta, mantequilla, arroz, dulces…..y oraciones.
Así que he disfrutado de unos días entrañables en compañía de las niñas, quienes también me echaban de menos y estaban muy entusiasmadas con mi llegada. A partir de mañana comenzaremos las tareas en las aldeas de reparto de material escolar, pero condicionados por el cierre con la frontera con India y un pleito político que ha sumergido a Nepal en una crisis que lleva casi dos meses poniendo a los nepalíes al borde de la desesperación pues India no deja entrar carburantes, gas y otros productos esenciales sin los cueles la vida de la gente se hace muy difícil en las ciudades y las fábricas no pueden funcionar. No tiene esto pinta de tener solución pronto, pero ojalá la tenga y podamos volver a nuestras rutinas con normalidad, sobre todo después de un terremoto que nos ha dejado una ardua tarea de reconstrucción.
Ahora mismo los precios de los pocos productos que se consiguen en los mercados suben sin parar, el transporte es mínimo, la gasolina se racionaliza y apenas tocan dos litros semanales por moto, no hay gas y la leña no siempre se encuentra.
En fin….esperemos los reyes nos traigan la paz y la cordura para que las cosas se normalicen. De momento se sobrevive, los nepalíes son muy enteros en estas situaciones adversas…..pero todo tiene un límite.
Bueno gente….gracias por estar ahí…..un fuerte abrazo a todos.
