El amor lo es todo. No se ve, no hay palabras para definirlo, pero es donde queremos estar, donde surge una inmensa paz y la alegría de vivir. Nos hace querer ser un poquito mejores, observarnos, ver nuestras carencias, aceptarnos, ser empáticos, querernos y apreciar a quienes nos quieren. A veces puede que nos cueste expresarlo, apreciarlo, sentirlo en lo cotidiano, en lo simple. En la vida surgen experiencias que siempre nos apuntan a amar, pero cuyo dolor nos ciega, nos descoloca, nos deja perdidos. Pero todos lo anhelamos y nos sentimos mejor cuando amamos. Tener con quien compartirlo es un regalo: nos brinda los momentos más felices, la comprensión, el respeto, el agradecimiento, el perdón.
Desde Nepal les desean nuestras niñas en la casa de acogida mucha salud y mucha paz.
Con un profundo agradecimiento por parte de todos en esta familia.
FELIZ NAVIDAD Y MUCHO AMOR