Hola a todos,
Hace unos días Basanti, una de las primeras niñas que llegó a nuestra casa de acogida y que hoy en día cursa su carrera y trabaja para nosotros, me mandó fotos de un niño que había visto trabajando en una cantina. Lo había encontrado de camino a una de las aldeas donde trabajamos y, conmovida, sacó las fotos.
Ella sabe perfectamente que “eso” es lo que queremos evitar, y sabiendo en sus carnes lo que es vivir en absoluta precariedad, quiso hacerme saber que ella ahora entiende por qué me quedé en Nepal, por qué se fundó Educanepal, y que se siente orgullosa de ser parte de esta familia. También se siente triste de seguir viendo imágenes como ésta, pero también sabe que tienen mucho valor para que yo, en mis visitas a España, pueda hacerles entender que hay muchas razones para ayudar a Educanepal, ésta es solo una de ellas… miles de niños explotados laboralmente, a veces, solo por un plato de comida.
El viernes pasado tuve la oportunidad de compartir un ratito muy emotivo y cercano con aquellos que acudieron a Agaete, en Gran Canaria, para conocer más de cerca nuestra labor. Gracias por venir, por darle sentido a lo que hacemos, gracias por la compañía y las extiendo a todos los que colaboran con nosotros… y hacen posible que niños como éste pasen de la esclavitud laboral a las aulas.
Un fuerte abrazo.
